El peor día

I feel the earth move [Carole King]

Hoy he tenido uno de los peores días que recuerdo, por no decir el peor. No solo ha sido (es) malo por omo ha ido, sino, sobre todo, por el mar sabor de boca que me ha quedado de comoha sido el día.
De todo lo que ha ocurrido, hay una cosa que es la me trae de cabeza. Esta mañana, como otras muchas, mi hijo consinguió sacarme de mis casillas. Tengo una paciencia enorme, gigante, pero hay cosas, pequeñas cosas que hacen que, casi, pierda los papeles. En todo el jaleo le he dado un azote o dos cuando su rabieta era desmesurada, esto no lo ha arreglado, claro. Lo peor es que esta mañana ha conseguido cabrearme para mucho más, estaba deseando dar un puñetazoa a algo, algo que se rompiese, un mueble, una puerta, no, no a una persona. En este estado, la verdad, me he dado miedo, no creo que jamas le vaya a dar una paliza a mi hijo, no es eso, me puedo calentar, pero tengo demasiado cerebre, el tema es que hoy ha sido un poco más que en otros enfados. Lo que menos me gusta es que mi hijo me haya visto así. Sé que no va a tener ningún trauma (espero) pero no es lo que quiero que mi hijo recuerde de mi. No me gusta que mi mujer me haya dicho que alguna vez, por la tarde, según le ha recogido de la guarde, lo primero que le haya dicho haya sido "papá no está enfadado". Joder, me ha hecho sentir muy mal, no estoy todo el día a voces, ni mucho menos, yo diría todo lo contrario, me paso el día jugando con él, a piratas y Peter Pan, a montar en caballo, con las motos, ... jugamos mucho. Pero hay momentos en los que me puede. Mañana, desde luego, ni una voz, pero es dificil, cuando ves que llegas tarde al trabajo y él dice que no quiere ese pantalón, o que prefiere zapatos a botas, o que hoy no desyuna, es dificil, pero mañana, mañana con una sonrisa, la mejor sonrisa. Aunque sólo sea para olvidar lo de hoy.
Eso ha sido para empezar, porque en el trabajo, no ha ido mejor, de hecho ha ido todo a peor, el trabajo, mal y tarde, he llegado tarde a una cita muy importante, la ecografía de mi segundo hijo. Esto no ha hecho más que cabrearme más todavía. Sólo pensaba, pro favor, que no me pase nada en el coche, que no me piten, que no me hagan una pirula, porque hoy no respondo, hoy tenía adrenalida o, mejor dicho, rabia hasta en las cejas. Me he mirado al espejo y, como decía antes, me he dado miedo. Sé como soy, bueno era, en esos momentos de rabia máxima, no he pegado nunca a nadie (no cuento las peleas de hermanos;) ) pero hoy, hoy estaba muy muy muy cabreado, mucha rabia, fuego,ira, ceguera, no era yo, sabía lo que había, y no quería dejar de serlo, estaba como un toro necesitaba ... dar un puñetazo. No lo he dado,y creo que aunque todo ese genio esté aplacado ahora, está dentro, no se ha esfumado, y no quiero que siga aquí, no quiero terminar dando un grito a mi mujer por una tontería, como puede ocurrir, debo poner todo de mi parte para que no pase.
Otras veces, cuando me caliento tanto, mi solución es dar un puñetazo a algo, uan pared, una puerta, algo que no rompa, que me haga daño, en esas décimas de segundo que dura el golpe, sale toda esa rabia, es como un desagüe.
Bueno, no quiero hablar más de esta mierda de día, que me vuelvo a cabrear.